Posibles reacciones de los niños ante un desastre

Es normal que los niños reaccionen con estrés justo después de una emergencia.

Los bebés y niños pequeños podrían:

  • Comenzar a mostrar las mismas emociones que sus cuidadores o podrían comportarse de manera diferente, como llorar sin motivo, mantenerse alejado de las personas o no jugar con sus juguetes.
  • Volver a chuparse el dedo u orinarse en la cama por la noche.

Los niños en edad preescolar podrían:

  • Tener problemas para acostumbrarse al cambio y a la pérdida.
  • No ser capaces de autorregular sus emociones y tener que depender de los adultos que los rodean para que los ayuden a sentirse mejor.
  • Volver a las conductas típicas de los niños más pequeños.
  • Sobresaltarse con facilidad.

Si algún comportamiento dura más de dos a cuatro semanas, o si de repente más adelante aparecen nuevos comportamientos, estos niños podrían necesitar más ayuda para afrontar la situación. Hable con la familia del niño sobre la posibilidad de remitirlo a los servicios de salud mental.